20/07/2012 (20:00):
Por Andoni HUEGUN
La Federación Española de Baloncesto ha remitido a la sede del Club, en el Paseo de Anoeta de la capital guipuzcoana, el certificado en el que se nos informa que Cafés Aitona Askatuak ha sido proclamado el mejor equipo de la Liga EBA 2011 – 2012 por delante de los 76 equipos restantes que componían una edición que este año, desde el punto de vista competitivo, ha resultado espectacular.
El Secretario General Adjunto de la F.E.B, Alfredo Olivares Aragón, nos ha comunicado con carácter oficial que Cafés Aitona Askatuak es el campeón de la Liga Española de Baloncesto Aficionado (E.B.A), que se disputó entre 77 equipos encuadrados en cinco grupos repartido por toda la geografía peninsular.
Nuestros hombres han hecho la más brillante temporada deportiva de la historia del Club mostrándose poco menos que imbatibles a lo largo de todo el año 2012, en el que cosecharon una única derrota en Madrid ante el Real Canoe N.C. -que supo a gloria- y que encima supuso el ascenso a la Liga LEB o Adecco Plata.
Sirvan estas líneas y el documento que se adjunta con la información como nuevo reconocimiento a la imponente labor realizada esta temporada por todos los componentes de Askatuak.
08/06/2012 (18.25)
Por Aitzol Almandoz
Tras lo vivido el sábado en la cancha del Canoe madrileño he sentido la necesidad de escribir unas palabras. Porque los que estuvimos allí difícilmente olvidaremos aquel día, aquel intenso partido, aquel estallido de alegría. Fue la guinda a una temporada de ensueño.
Porque el equipo se ha portado auténticamente como un EQUIPO. Todos hemos visto cómo ha jugado, y el baloncesto que ha desarrollado los fines de semana. Pero es que entre semana, en los entrenamientos, el nivel de estos chavales todavía si cabe mayor. Cuántos entrenamientos en los que no hacía falta corregir detalles sino animar y observar el juego de estos titanes. Sólo nos faltaban las pipas…
Y lo ha hecho sobreponiéndose a innumerables obstáculos en el camino. Principalmente la de tener una plantilla más bien corta y que a raíz de la más que sensible baja de Urko, se quedaba debilitada en la pintura.
Pero desde el principio, en aquellos entrenos del Balda a primeros de agosto, David nos transmitió las ideas claras y muy sencillas. Ideas que con el trabajo y esfuerzo de todos fueron calando en los jugadores, que fueron interiorizando, de una forma espectacular (los resultados saltan a la vista). Un juego basado en el talento del jugador, confiando en su toma de decisión, que hace que al adversario le resulte muy complicado defender al no tener sistemas al uso. Y atrás, en defensa, ahí sí, esfuerzo y sacrificio máximos, eso es innegociable.
Así hemos vivido un temporada inmejorable con Asier, creo que en su mejor momento, siendo nuestro “Almirante” (como me gusta llamarle) porque guía a esta tropa de espartanos del basket. Ha sido el faro que ha guiado y liderado el grupo, que a la citada baja Urko, respondió cerrando filas para que no se note su fuerte personalidad y su fina muñeca.
A ello ayudó, indudablemente, la llegada de Carlos. Desde el primer entrenamiento se le vio su nivelazo y lo ha demostrado partido a partido, dándole al equipo ese punto de tranquilidad en los momentos álgidos acompañados por triples imposibles que han valido prórrogas y partidos.
Y qué decir de Delva, que ha sido la punta de lanza del equipo en una temporada también excelente, un misil que no ha encontrado oposición en su puesto en los equipos rivales. Y el gran “culpable” de ello ha sido nuestro gran Pablo que se ha roto el pecho (casi de forma literal) en cada entrenamiento ganándose sus minutos con sangre y sudor. Desde aquí me quito el sombrero.
Xabi, por su parte, se ha convertido en nuestro “soldado universal” porque le ha tocado dar uno no, dos pasos al frente y lidiar con todo lo que se ha puesto en frente ya sea en forma de pivot rocoso o alero anotador. Ha sabido hacer de todo, aceptando el rol que le ha tocado en cada momento y dando lo mejor de sí en el momento clave. Chapeau.
Jon Ander, Jonan, también ha experimentado un crecimiento espectacular y aunque de forma irregular, típico de su juventud, nos ha permitido en ocasiones jugar por encima del aro, cosa que está al alcance de poquita gente a este nivel.
Toca hablar de los dos Jon-es, Castel y Aldalur, con los que me batía el cobre hace un par de años y que ahora están a años luz. El primero ha demostrado que se pueden hacer partidos soberbios sin meter ningún punto pero que es capaz también de hacer partidos sensacionales de cara al aro. Ha sido el termómetro defensivo del equipo: si Castel defiende fuerte, está enchufado, el resto se contagia, se enchufa también y empieza a jugar como sabe.
Aldalur ha sufrido una metamorfosis camaleónica y se ha convertido en un jugador que sabe jugar duro atrás sin olvidar la inmensa calidad que atesora en ataque. Yo le llamo el “Iniesta” del equipo porque te rompe la cintura (lo digo porque lo he sufrido) con cada recepción balón y salida orientada. Por no hablar de la excelsa muñeca que tiene…
Y por último me gustaría hacer una mención especial al trabajo de Iñaki Ascensión, menos espectacular tal vez, más silencioso pero que ha sido importantísimo en el día a día del equipo y que, saliendo desde el banco, ha sabido gestionar situaciones que parecían auténticas patatas calientes. Todavía recuerdo el partido contra el Mercamueble, aquel frío domingo por la mañana, donde el equipo estaba negado de cara al aro, pues ahí aparece Iñaki para echarse el equipo a la espalda con sus triples y medio-ganchos. O el partido contra UPV en Vitoria. ¿Que el equipo está agarrotado con la zona planteada por el rival? Balón a Iñaki y triplazo desde la esquina…
Podría pasarme horas relatando anécdotas y detalles que han hecho muy grande a este equipo. Y el cerebro y aglutinador de todo ello, David, un descubrimiento a nivel personal y baloncescístico. Espectacular el trabajo diario, a medio plazo y a largo plazo cuyos resultados saltan a la vista. He tenido la inmensa fortuna de compartir este año con él y aprender como nunca. Rubén y yo ayudábamos en el día a día como modestamente podíamos…
Todo ello con la tranquilidad que aporta tener a una directiva apoyandonos y ayudándonos en todo: Galis, Gabi, Cialceta, Iñaki , Andoni…
Pero este escrito, no pretende ser más que un humilde homenaje a esos fieles que nos han acompañado toda la temporada y que nos brindaron un sábado por la tarde memorable. Fue impresionante ver a las futuras generaciones del club, padres y simpatizantes, etc. animar desde el minuto cero hasta el cuarenta, a más no poder, empapados de sudor por el asfixiante calor. Ni speaker ni nada, la afición visitante barrió desde el principio a la local. En la grada no hubo color.
Asier me reconocía que les dio alas el ver levantarse medio pabellón cada vez que metían una canasta, en esos momentos (con perdón) jodidos en los que el Canoe apretó. La ilusión que transmitían esas chicas y chicos animando sin descanso permitió al equipo no arrugarse cuando peor pintaban las cosas y dar la vuelta (una vez más) a la situación adversa y conseguir el objetivo soñado.
Si el equipo ganó sobre el parqué del Gasca la mitad de la eliminatoria, la afición ganó la otra mitad en las gradas del pabellón del Pez Volador. De eso no me cabe duda.
Reconozco que me monté en el bus de vuelta a las tantas de la mañana todavía emocionado, recordando los cánticos y vítores que no cesaban (Ikusi mendizaleak, Delva-Delva, Carlos quédate,…)
No fue sólo un ascenso deportivo, fue un ascenso social, un chute de ilusión y de buen rollo que nos durará mucho tiempo…
Benetan, bihotz-bihotzez eskerrik asko denoi!
Aitzol Almandoz
05/06/2012 (21:00) :
Cafés Aitona se ganó la LEB en
Madrid y eso que el Canoe se dejó
el alma sobre la cancha
En un choque durísimo e intenso, Askatuak hizo valer su carácter y los 18 puntos de la ida pese a que los madrileños estuvieron 19 arriba en el minuto 31
Por Andoni HUEGUN,
desde Madrid
Alineaciones:
65 REAL CANOE N.C.: Martínez (5), Solé (12), Valle (-), Pérez-Urruti (9) y Fort (6) -quinteto inicial- Yusta (-), Martín Fernández (9), González (8), Soto (2) y James (14).
56 CAFES AITONA ASKATUAK: Del Valle (8), Aldalur (-), Pérez (8), Aramburu (4) y Arzallus (14) -quinteto inicial-, Martínez (17), Aranzabal (1), Ascensión (-) y Castelruiz (4).
Marcador cada 5 minutos: 6 – 7 (m.5), 19 – 14 (m.10),
25 - 20 (m.15) 31 – 23 (descanso).
41 - 23 (m.25) 46 – 30 (m.30)
49 - 40 (m.35) y 65 – 56 (final).
Arbitros: Pedro Luis Aguado Muñiz y José Luis Miguel Ortíz.
Buena prueba de la dureza del encuentro es que hubo seis eliminados por faltas personales, tres por equipo: Maximiliano Solé, Borja Martínez e Ignacio Fort, por los locales; y Xabi Pérez (36´), Iñigo Del Valle (37´) y Jon Ander Aramburu (39´). Resulta inexplicable cómo no le pitaron ninguna técnica al entrenador del Canoe, Javier Juárez, que –histérico- no paró un segundo durante todo el partido de presionar a los colegiados como nunca se había visto. Curiosamente, la tomaron con nuestro técnico, David Blanca, ante cualquier apreciación puntual de éste, si bien aguantaron sin sancionarle. Pero J.Juárez se pasó tres pueblos…
Incidencias: El Polideportivo del Pez Volador de Madrid fue una sauna gigante. No sé a qué temperatura estábamos pero resultó inhumano para todos, jugadores y espectadores. Desconozco si se trataba de una encerrona climatológico-ambiental pero no había nada de aire en aquella Cápsula de Faraday. Ventanas cerradas herméticamente. Asfixia absoluta.
750 personas, según la ficha oficial, nos dimos cita en la cancha del Real Canoe N.C., fundado en 1930, y que a lo largo de estos ochenta años ha brillado sobre todo como uno de los grandes clubs de la natación española. Aunque también es verdad que ha mimado especialidades deportivas como el baloncesto. Hará unos treinta años, Askatuak ya jugó y le ganó al Canoe en este mismo Pabellón.
Cafés Aitona dispuso de una hinchada apoteósica que llevó al equipo en volandas en los momentos más delicados. Los más de un centenar de aficionados, entre los llegados de San Sebastián en autobús y en coches particulares, más donostiarras y simpatizantes residentes en Madrid (algunos ex-jugadores, incluso), fueron sin duda factor clave del éxito de nuestro equipo para alcanzar tan ansiado ascenso.
Desde el primer minuto hasta el 40 se desgañitaron animando y nada pudo interponerse entre nuestro equipo y su afición pese a que algún encargado del pabellón quiso silenciar el bombo, las turutas y hasta las voces si hubiera podido. Lo más curioso del caso es que los seguidores del Canoe disponían de su bombo y sobre todo su speaker no paró de usar la megafonía general de la instalación para calentar a los suyos “vamos que podemos…” gritaba entre otras cosas. El operario censurador, aunque perseveró, hubo de marcharse con viento fresco sin conseguir acallar a nadie, faltaba más. A punto estuvo de llevarse incluso algún coscorrón.
La fiesta final resultó memorable. Jugadores y aficionados compartimos una alegría inenarrable. Abrazos, cánticos, felicitaciones, besos… Una hora después allí seguíamos sobre la cancha “campeones, campeones…” y luego a la entrada del pabellón. El viaje de vuelta ni nos enteramos, dale que te pego con el himno de Askatuak, el gran símbolo fetiche de esta final. Sé de más de uno que carga una afonía sin trazas de desaparecer aunque tampoco hay manera de que nada le quite su sonrisa de la cara.
El dulce sabor de la victoria.
Hacía años que Askatuak no se llevaba al cuerpo un alegrón como el que nos dimos el sábado ante el Canoe en la cancha madrileña del Pez Volador.
El siglo XXI no ha sido precisamente fácil para la trayectoria de este maravilloso club. Han sido años difíciles que han requerido de mucho ánimo personal y donde ha habido que sortear enormes dificultades, cierta soledad, bastantes incomprensiones, y a veces hasta humillaciones, pero que jornadas como la del 2 de junio de 2012 -días así- justifican los esfuerzos, el cariño, entrega y dedicación puestos y quedan para siempre grabados en el corazón.
Solo comprobar cómo animaron más de cien valientes que se desplazaron hasta Madrid para ver una final de la Liga EBA fue una satisfacción. De verdad, y he de ser sincero, llevo toda la vida vinculado a esta casa, de una u otra manera, y nunca había visto poner en el asador la carne que puso nuestra gente el sábado en la grada de Madrid.
Memorable. Me lo reconoció más de un jugador. Cuando en el minuto 31 sonaron las alarmas rojas del partido y un descomunal Real Canoe, impresionante de coraje y por la fe en sus posibilidades que derrochó a lo largo de los 40 minutos, se puso 49-30 en el marcador, aquello cobraba pinta de debacle donostiarra.
Porque hasta entonces, no sé si producto del clima de la jaima sahariana aquella, de que el Canoe salió a jugar el partido herido en su orgullo, o porque nuestros hombres creían que al tran-tran la ventaja de 18 la podríamos mantener pasase lo que pasase, el caso es que allí no había habido más que un equipo sobre la cancha.
Se llevaban tres cuartos de partido y estábamos en 30 puntos pero, sobre todo, no progresábamos y lo necesitábamos urgentemente. De no haber sido por el cohete de la grada, por la intensidad y el ritmo de los animadores, que no desmayaron ni dudaron un solo momento, aquello, me atrevo a decir, iba camino de un final amargo.
Pero claro, teníamos sobre la cancha una carta escondida en la bocamanga y ahí apareció ese jugador decisivo y que cualquier equipo que se precie necesita. Ese líder natural, con personalidad, que en los momentos imposibles se echa a los hombros la complejidad de la situación y arrastra con su vocación a los compañeros hasta el máximo que puedan dar, hasta la gesta.
Carlos Martínez Díaz de Corcuera, madrileño para más señas, que permaneció sentado al inicio del tercer cuarto, lo que le vino que ni `pintao´, cogió las riendas del partido en el momento de más desgaste donostiarra y, como lo ha hecho más de una vez esta temporada, incorporó al equipo en el último cuarto, en el momento imprescindible, a una dinámica de verdad, con carácter, sentido común y una intensidad defensiva que no quedaba otra.
Asumió la dirección y el criterio del juego, sin miedo, y con la ayuda fundamental un día más del que ha sido el jugador más valorado de la temporada, la “mano de dios” Asier Arzallus (10 puntos y 4 rebotes en la segunda parte y unos porcentajes muy altos un día más), enderezaron el proyecto que nos ha hecho ser los mejores de la Liga EBA 2012 y que Cafés Aitona Askatuak no se hubiera merecido perder.
Carlos Martínez sumó unos números de 17 puntos y 14 rebotes defensivos (había que ver cómo cerró la zona) y por ahí se escaparon gran parte de las posibilidades del Canoe, que no cejó en la segunda mitad en tratar de atizarnos el hachazo final (41-23, en el minuto 25 y 49-30, a los 31 minutos).
Pero había llegado el último cuarto y ahí se vio de nuevo al Cafés Aitona de verdad. Al de la inspiración de toda la temporada, que con los valores narrados y la aportación del conjunto del equipo (David Blanca y el banquillo mantuvieron espléndidamente el equilibrio y la serenidad en los momentos difíciles) supo enderezar y contrarrestar con oficio cada tirón final desesperado que daban los jugadores del Real Canoe.
Lo que exigió marcar un parcial favorable de 19-26 en el último cuarto, con un Canoe echando el resto, pese a la incomprensión de su entrenador, Javier Juárez, al que había que observar qué broncas echaba a sus jugadores cuando no cejaron el dejarse el alma en el combate. “Es muy intenso, pero es muy buen entrenador”, me comentaron algunos antiguos jugadores suyos, bien comprensivos con el técnico, por cierto, con los que hablé.
La duda que me asalta es si el equipo madrileño necesitaba en el banquillo un tipo tan desquiciante, un espectáculo del descontrol (pero qué bronca le echó al cariacontecido David Yusta hasta que le mandó a la mierda éste). No parecía necesario tanto show por la forma que afrontaron sus hombres los 40 minutos en El Pez Volador. Salieron a muerte y a punto estuvieron de coronarse como héroes.
Lo que proporciona doble mérito y potencia el éxito en el playoff final de Cafés Aitona Askatuak, que ha cuajado una temporada memorable, con 21 victorias y 5 derrotas en la competición oficial, campeón EBA-Norte de la Liga regular, y ganador de dos playoffs ante los dos mejores equipos del oeste y el centro de la Península.
Ahora, ha llegado el momento de trabajar para estar en la Liga LEB.
Lo vamos a intentar.
¡¡¡ Zorionak, campeones !!! ¡¡¡ Zorionak, afición !!!
Reportaje fotográfico:
· Berta SPRINGER
· Gorka GARRIDO
· Lorenzo BASELGA
Gran parte de la afición desplazada a Madrid compartió el ascenso
con el equipo en la foto final.
Los grandes colosos de la gesta. ¡¡¡ Campeones !!!
Después de 35 años como Presidente, Iñaki Almandoz se llevó el
primer manteo de su vida. Qué alegría.
La temporada deportiva ha sido extraordinaria. Y la
guinda,
ganar al Canoe de Madrid
El saludo final de nuestros jugadores a un gran rival como el Canoe.
La explosión del triunfo tras la intensidad de un
partido a
cara de perro.
Carlos Martínez Díaz de Corcuera se quedó en Madrid con la
txapela de Askatuak puesta por el Presi
La emoción en la cara de este espléndido jugador que
tanto
nos ha ayudado con su concurso.
Los formativos de Askatuak, nuestra gran cantera,
más los
adultos, la armamos animando.
Media grada del Pez Volador era del Askatu.
La caldera del Pabellón del Canoe resultó una auténtica
jaima
sahariana. Qué calor.
Fue una final de campeonato. Para jugadores con mayúsculas.
Basket de verdad. Durísimo y hermoso.
Hubo que poner sobre la cancha todo para ganar el playoff.
El
rival quería mordernos.
El Canoe apretó desde el primer minuto. En Donosti
habíamos
herido su orgullo.
Cafés Aitona supo capear el temporal en el momento
clave,
el 4º cuarto
La unidad y la gran piña como
equipo volvieron a ser el
factor clave del éxito.
Iñigo del Valle ha cuajado un año espectacular. Un gran director.
Cafés Aitona,
durante la presentación de equipos.
Estábamos dispuestos para la batalla.
David Blanca, junto a su compañera Eli Toledo, ha sido el principal artífice
del éxito de este equipo. Otro entrenador para la leyenda de Askatuak.
Aitzol Almandoz, 2º entrenador, y Rubén Martín, delegado y adjunto, han
compuesto el equipo técnico de este magnífico Cafés Aitona de la EBA.
Urko Fernández, lesionado todo el año, ha ayudado hasta el final. Su táctica
psicológica observando al rival fijamente plantado en el centro del campo, en
el calentamiento, descolocó a más de uno del Canoe. Genial.
(En la foto acompañado de Puy)
Xabi Pérez, que ha hecho una gran temporada también, trajo hasta Madrid a la
familia. Faltaba el aita pero el aitona, tan majo, estaba allí. Vaya ´ochentas´
tan bien conservados.
Gabriel Martín, el todo-terreno de Askatuak desde hace muchos
años y pieza importante del día a día del club, disfrutó de lo lindo.
Presidente y vicepresidente, Iñaki Almandoz y Andoni
Huegun,
en uno de los días
más grandes de su vida deportiva.
El clan de Alza ha aportado al equipo todo y más. Fabulosos.
Nada hubiésemos podido hacer sin su empuje. De diez, chavales.
Los jugadores subieron al autobús de la afición para
aplaudir
a los animadores. Carlos Martínez, el gran Asier Arzallus e Iñigo Del
Valle desfilan por el pasillo.
Iñigo del Valle aplaude al personal.
Ion Aldalur se ganó
la titularidad en la final y no quiso
perderse el agradecimiento a la afición.
Jon Castelruiz, el mejor sexto hombre de la Liga, filmó
a los
presentes en el autobús.
El secretario técnico del club, Fernando Galilea,
leyenda viva
de Askatuak, ha sido el arquitecto de la obra de Cafés Aitona 2012.
Fernando Cialceta, fisio, masajista, casi padre. Siempre
presto
a
ayudar en lo que se le solicite. Qué tío.
Iñaki Almandoz dirige la orquesta de Cafés Aitona
Askatuak
mientras suena el himno y él toca la trompeta de la Big Band. Sin él
nunca hubiéramos
llegado a donde estamos en la LEB.